No envejecer:
Cuerpo, mente y tiempo.
Entender que la juventud es el paso que nos prepara para la madurez es clave para disfrutar de ésta plenamente.
Intentar recuperar nuestra juventud, sin disfrutar del carisma que nos brinda la experiencia, nos lleva a padecer nuestra madurez.
El paso de los años no nos quita nada. Por el contrario, nos enriquece con experiencias y sabiduría. Plenitud pura.
Imaginen a una mariposa plegando sus alas para seguir siendo oruga, en lugar de disfrutar de la libertad de volar…
La mente joven no está preparada para manejar un sistema tan complejo como es el cuerpo humano.
Pero sí lo está una mente madura que controla un cuerpo con el cual convive hace tantos años, perfeccionándose constantemente.
Una palabra clave: Aceptar
La nostalgia del tiempo pasado (muchas veces idealizado) es normal, pero sólo es saludable dentro de ciertos límites.
Aceptar que “lo que fue y ya no será” es lo maravilloso de la vida, nos permitirá disfrutar este cambio constante.
Disfrutar nuestro cuerpo y experiencia
El cuerpo es parte de nuestro ser, no lo rechacemos. Disfrutemos de nuestro cuerpo en cada etapa de nuestra existencia.
Practicando Yoga durante años, cada vez estoy más convencida de que esta conexión mente/cuerpo se fortalece con el tiempo.
Son un conjunto de engranajes que se van adaptando mutuamente para integrarse y funcionar en conjunto armónicamente.
Cuando practicamos Yoga, utilizamos el cuerpo como vehículo de nuestra mente, creando así un flujo energético.
Y esta energía es la que quiero compartir con ustedes, para que esté en constante flujo a través de nosotros.
SALTY WATER YOGA
